Una de las iniciativas imprescindibles para cuidar y proteger los espacios que nos rodean es crear conciencia sobre la importancia que tienen.
A veces podemos pensar que algunos problemas mundiales, como cuidar del planeta, dependen de la intervención de gobiernos y empresas más que de uno mismo. Pero lo cierto es que la acción individual tiene un impacto enorme sobre cuestiones ambientales como el cambio climático. Promover la importancia de las acciones pequeñas es el objetivo del Día Mundial de la Educación Ambiental. En definitiva: tomar conciencia ecológica y generar hábitos y actitudes de respeto por el medio ambiente en todos los estratos de la población.
¿Qué es la Educación Ambiental?
La educación ambiental nació en la Declaración de Estocolmo en 1972. Desde entonces, cada 26 de enero se celebra el Día Mundial de la Educación Ambiental, una jornada que cada año busca promover y concientizar a los ciudadanos de la importancia que tiene cuidar y proteger los espacios que nos rodean.
Una educación ambiental adecuada ha de perseguir el aprovechamiento óptimo y responsable de recursos, porque algunos de ellos, como el agua potable, son escasos. También se debe promover el reciclaje y el aprovechamiento máximo de los residuos que generamos. En definitiva, debemos crear conciencia de lo importante que es reducir nuestro aporte individual a la contaminación, unos de los factores que están causando el cambio climático. Y como cuidar el planeta es cosa de todos, la educación ambiental no está dirigida exclusivamente a niños y niñas, sino que es una tarea con la que los adultos han de estar también comprometidos. Siempre hay conductas ecológicas por aprender.
Ayudar a cuidar el planeta en 10 pasos
- El agua no es un recurso ilimitado. Poder beber agua limpia es un derecho más que un privilegio, pero la realidad es que existen grandes desigualdades en el mundo respecto al acceso al agua potable. De hecho, 3 de cada 10 personas en el mundo carecen de acceso a agua potable en sus hogares. Por eso es esencial en nuestra vida cotidiana ahorrar agua.
- Usa más el transporte público, ve en bicicleta o camina. Estas acciones nos enseñan cómo cuidar el planeta contaminando menos, protegiendo el medio ambiente y cuidando de nosotros.
- Reutiliza y restaura antes que consumir. Por ejemplo, reutiliza la ropa, dona libros, compra objetos de segunda mano o restaura muebles antes de tirarlos. Puedes incluso reutilizar botellas de plástico para crear pequeños inventos.
- Recicla papel y enseña a los niños las diferencias que hay entre distintos residuos de cara a un perfecto reciclaje.
- Reduce el uso de bolsas de plástico. Se pueden usar varias veces, pero también hay otras opciones para transportar cosas. Evita comprar fruta y verduras envasadas en plástico.
- Realiza actividades manuales para realizar juguetes con materiales reciclado. Así ayudarás a crear conciencia sobre el medio ambiente.
- Trata a los animales y plantas con respeto. Para practicar la educación ambiental con niños, puedes llevarlos de visita a granjas y parques naturales. Allí entenderán la importancia de tratar bien a todos los seres vivos.
- Apaga la luz de los lugares en los que no estés. No olvides que no hay nada como cuidar el planeta a través del ejemplo. Si tú lo haces, ellos lo hacen.
- Compra lo esencial. Demuestra a los niños que el consumismo sin sentido y desmedido no conduce a nada.
- Compra alimentos que estén en cosecha para respetar sus ciclos y favorecer a los agricultores.
Fuente: