Hasta el 8 de septiembre estará abierta la convocatoria para participar en el “Mapeo de Buenas Prácticas en Educación Digital de las Américas”, dirigida a establecimientos educativos, públicos y privados, de educación preescolar, básica y media; así como a organizaciones de la sociedad civil de América Latina y el Caribe.
La Alianza OEA y Fundación ProFuturo buscan crear un mapa con las prácticas más innovadoras que se hayan realizado en las Américas entre 2020, 2021 y 2022, enfocadas en educación digital y nuevas tecnologías.
Esta convocatoria quiere destacar las iniciativas de instituciones educativas y organizaciones de la sociedad civil de los países de América Latina y el Caribe, que promuevan oportunidades de aprendizaje y generen un impacto positivo en la comunidad educativa. Se buscan proyectos innovadores que apunten al seguimiento de las trayectorias escolares y la recuperación de los aprendizajes, contemplando la integración de las nuevas tecnologías digitales para estos fines.
Las buenas prácticas tienen que haberse iniciado por lo menos en 2020 y estar activas a la fecha del Mapeo.
Las entidades participantes podrán postular más de una buena práctica, siempre y cuando esta última haya sido desarrollada por un/a docente, directivo o representante de organización de la sociedad civil diferente.
Criterios para la presentación de las buenas prácticas
Las buenas prácticas que se postulen serán analizadas con base en los siguientes aspectos:
Enfoque de derechos humanos y equidad: la buena práctica está fundada en un enfoque de derechos humanos y equidad y contempla la perspectiva de género. Está destinada a instituciones y/o estudiantes en condiciones de vulnerabilidad socioeconómica, prestando atención a grupos minoritarios (población migrante, rural, indígena, con discapacidad y otros).
Innovación: la buena práctica propone una estrategia pedagógica novedosa para lograr el propósito buscado, vinculado con el seguimiento de las trayectorias, la recuperación de aprendizajes y/o el fomento de habilidades y competencias. Contempla el enfoque multidisciplinario, el aprendizaje basado en proyectos, el uso de datos y/o la gestión a partir de la información para el seguimiento de trayectorias y/o involucra la promoción de habilidades y competencias (transferibles y digitales).
Integración de TIC y TAC en la escuela o el aula: la buena práctica integra las TIC (tecnologías de la información y la comunicación) y/o las TAC (tecnologías del aprendizaje y el conocimiento) en procesos áulicos y/o de gestión institucional, para favorecer la implicación de los estudiantes con la escuela (trayectoria escolar), para favorecer la recuperación de aprendizajes y el desarrollo de habilidades y competencias.
Articulación y colaboración: la buena práctica promueve la participación activa de estudiantes y otros miembros de la comunidad educativa, así como la articulación con otras escuelas y/o diferentes sectores (organizaciones internacionales, sector privado, comunidad local, otros) en la implementación de la práctica.
Sostenibilidad y replicabilidad: La buena práctica está estructurada y puede ser difundida para su réplica contemplando posibles adaptaciones de contexto. Es factible de implementarse con los recursos presentes en las escuelas o pocos recursos y/o inversiones adicionales.
Sistematización y resultados: la buena práctica se encuentra sistematizada (objetivos, procesos, componentes y actividades definidos en pos de un logro) y cuenta con indicadores de resultados sobre los avances de la implementación, vinculados con la mejora de las trayectorias escolares, la recuperación de aprendizajes y el desarrollo de competencias y habilidades.
Esta convocatoria se encuentra cerrada