El Programa de Educación Rural, PER I, surgió como resultado de los acuerdos del “Contrato Social Rural” de 1996 que planteó la necesidad del acceso a educación de calidad en las zonas rurales y de difícil acceso del país. En 1999 el Ministerio de Educación Nacional a través del CONPES 3056 solicitó a la nación autorización para gestionar un préstamo con el Banco Mundial, con el fin de desarrollar la primera de tres fases del Programa de Educación Rural PER 1.
El programa se implementó entre el 2001 y el 2006, a través de cuatro componentes:
- Cobertura con Calidad, cuyo fin era ampliar la cobertura de la educación rural por medio de la creación de cupos.
- Fortalecimiento Institucional, a través de (i) la conformación de alianzas estratégicas departamentales con participación del sector educativo oficial, del sector privado y las organizaciones de la sociedad civil, (ii) el fortalecimiento de la capacidad de gestión de los departamentos y municipios desarrollando procesos participativos y conformando equipos para la formulación y ejecución de subproyectos departamentales, y para multiplicar la capacitación de docentes en la implementación de los modelos educativos flexibles, iii) estructuración y puesta en marcha de un sistema de seguimiento para la programación, el control de la ejecución y la medición de logros del proyecto.
- Convivencia Escolar, o educación para la coexistencia pacífica; este componente se planteó desde el desarrollo de competencias ciudadanas por medio de proyectos encaminados a mejorar las condiciones de convivencia, la participación y la solución pacífica de conflictos de las instituciones y comunidades educativas rurales.
- Media Técnica Rural, donde se diseñaron los lineamientos generales de política. Una de las estrategias desarrolladas para el componente uno, fue el de las “opciones educativas”, que en 2004 se consolidaron como “Modelos Educativos Flexibles”. Muchas de esas opciones ya estaban circulando en el país como, por ejemplo, Escuela Nueva para niños y niñas; SAT, SER y Cafam para jóvenes y adultos.
En el marco del componente dos, se trabajó con los departamentos y municipios para conformar unidades operativas, eso incluía el acompañamiento del MEN a las ETC y la elaboración de los diagnósticos territoriales. Asimismo, se avanzó con la entrega de las canastas educativas de los modelos educativos flexibles, que incluían materiales propios, materiales para los docentes, entre otros.